¿Libro de ficción?
Pasaron varios meses sin que yo notara progresos. Hablaba y
hablaba de lo de siempre con mi psicoanalista, el doctor Pagaitexkutxoundia, pero
no avanzaba. Al parecer, el aguafiestas de mi inconsciente no quería colaborar,
y así era muy difícil; prácticamente imposible. Un día quedé con Guillermo, y
le vi bastante bien.
--- ¿Sabes, Vicen? La
terapia que estoy haciendo me está sentando estupendamente… Me encuentro como
nuevo…
--- Hombre, cómo me alegro, amigo --- me congratulé --- Debe
ser que a tu inconsciente, a diferencia del mío, le gusta colaborar… Seguro que
comprende mejor lo que es trabajar en equipo…
--- ¿Mi inconsciente? No sé ni de que va eso, Vicen ---
replicó --- Mi terapeuta nunca me ha hablado del inconsciente.
--- ¿Nunca? ¡¿Qué dices?! --- reaccioné entre estupefacto e
incrédulo --- Pero si es la clave para progresar…
---???????
--- ¡Me estás vacilando, tío! --- insistí.
--- Vicen, comparado contigo, yo sólo soy un novato en todo
esto de los psicopsiquiatras; pero en mi caso, del inconsciente ese, ni mu.
Fue un shock terrible
que rompió todos mis esquemas; pero la realidad era que mi amigo había avanzado
y yo estaba cada vez peor. Claro que probablemente, pensé, su trauma sería más
leve: sin esas experiencias horribles que yo había protagonizado en mi infancia
que obligaban a una terapia más contundente. Quise convencerme; y para ello
elaboré una frase que me repetía constantemente: “lo mío es más profundo;
necesito comprender a mi inconsciente”. Hasta la grabé en mi móvil acompañada de
música, y lo programé para que sonara cada vez que me telefoneaba alguien. Yo
mismo, desde una cabina, me llamaba para poder oírlo. Así estuve más de veinte
días; hasta que harto de no convencerme, decidí cambiar de terapeuta y probar
con el que tenía Guillermo.
--- Bye, bye, inconsciente de mierda… estoy hasta los
mismísimos cojones de ti… ¡ahí te quedas!
(Tras decir esto, me sentí muy aliviado).
El terapeuta de Guillermo estaba de viaje, por lo que no me
dieron cita hasta tres semanas más tarde; y para mí era demasiado. Pero recordé
que en la empresa me habían hablado de uno al que llamaban “coach”. Según me
explicaron, no era un psicoterapeuta, sino alguien que te ayudaba a mejorar en
tu trabajo y en tu vida personal, pero sin que estuvieras tarado. La verdad es
que no entendí muy bien qué era lo que hacía exactamente, pero como pensé que
no tenía nada que perder y me urgía hablar con alguien, decidí pedirle hora.
--- Buenas tardes; soy Sebastián Alegre, coach certificado
por la Asociación Internacional, la Europea, la Española y la de Alcorcón. Soy
discípulo directo de José Miguel García Liante, fundador y presidente del
Alcorcón Coaching and Mentoring Institute; seguro que ha oído hablar de él…
(No pude evitar poner cara de no tener ni idea).
--- Sí, ha escrito varios libros --- continuó --- Seguro que
ha leído alguno…
(Me sentí culpable por ser tan ignorante).
--- Hay uno que es un auténtico bombazo: se titula “Eres un
ganador aunque aún no lo sepas” ¿Qué le parece?
--- Tiene buena pinta ¿no?
--- Más que eso --- saltó Alegre --- En este libro, García
Liante defiende una evidencia contundente: el espermatozoide que fecundó el
ovulo para darnos la vida, lo consiguió compitiendo con millones de colegas que
perseguían el mismo objetivo… pero sólo ese, precisamente ese, lo logró… ¡un
auténtico ganador! Y el resultado somos nosotros… unos ganadores en potencia…
pero eso hay que desarrollarlo, obvio… y para eso está el coaching…
(Me quedé asombrado con tan ingenioso planteamiento; pensé
que mi inconsciente sabría todo eso; y, sin embargo, el muy cabrón no lo había
compartido).
--- El gran maestro García Liante se formó como coach con
Ronny Pasas, que a su vez se certificó con George Pancake, seguidor de la
escuela de coaching desarrollada por Donald MacBurger, uno de los grandes gurús
a nivel internacional…
(Así se presentó el coach, dejándome casi sin palabras).
--- Me gustaría saber en qué le puedo ayudar; pero antes,
debo decirle que el coaching es algo más que un método de trabajo… Es una forma
de vida… y eso supone lograr una transformación en la que yo, su coach, estaré
acompañándole…
--- Ajá; comprendo…
--- ¿Lo comprende?
--- Sí, creo que lo comprendo…
--- ¿Lo cree? ¿O lo comprende?
--- Bueno, lo creo, sí; creo que lo comprendo.
(El coach asintió; y guardó silencio; hasta que se hartó).
--- ¿Así que cree que lo comprende?
--- Sí, así es…
--- Muy bien; me alegro de que lo comprenda --- recalcó el
coach --- ¿Y qué es lo que comprende?
---Pues eso; lo que me ha dicho…
--- ¿Lo que le he dicho?
--- Sí, sí…
--- Muy bien. Y de lo que le he dicho, ¿Qué es lo que
comprende mejor ?
--- Pues todo…
--- Entonces, ¿comprende usted que se necesita una
transformación para poder alcanzar lo que uno persigue?
--- Ajá… y bueno… supongo que eso es algo parecido a lo del
inconsciente --- me atreví a participar.
--- ¿El inconsciente? No; esto no es terapia. Mire, yo soy
licenciado en Económicas y coach, pero no soy psicólogo o psiquiatra. Eso es
otra cosa.
--- ?????
--- El coach le acompaña en esa transformación que necesita
para ser más feliz y gestionar mejor su vida…le hace preguntas para que usted
encuentre las respuestas…
--- Bueno, también lo hace mi psicoanalista…
--- Esto es diferente; no es psicología, es coaching; yo le
acompaño para que usted se conozca mejor y pueda alcanzar metas más altas… y
hay coaching ejecutivo, coaching directivo, coaching personal, coaching de
grupos, coaching deportivo, coaching educativo, coaching gastronómico… Supongo
que usted quiere el coaching personal ¿no?
--- ??????????????????????????????
--- Sí; para mejorar la gestión de su vida… Para eso lo
importante es que usted y yo, su coach, encontremos ese punto de encuentro en
el que nos beneficiemos mutuamente… esa conexión que nos sirva para lograr la
transformación psíquica, emocional y espiritual de la que le hablaba… ese
autoconocimiento… y para eso hay que profundizar…
--- ¿Profundizar?
(recordé a Cuenttini y a Pagaitexkutxoundia). Pero eso…
--- Mire; un famoso filósofo griego llamado Artodetekilas ya
lo decía: “Profundiza, transfórmate y crece”, una frase que inspiró mucho a
Amígdalas, laureado campeón olímpico de la antigua Grecia, quien a pesar de
sufrir una terrible inflamación en la garganta que le dificultaba respirar,
siguiendo las enseñanzas de Artodetekilas fue capaz de transformar el dolor en
estímulo positivo y, así, derrotar a sus rivales.
--- Pero eso… (quise decir algo, pero no pude).
--- ¡Ah! y fíjese que recientemente se ha sabido que el
legado de Artodetekilas formó parte de la cultura tolteca, el pueblo más
avanzado del México prehispánico… y eso que el filósofo vivió varios siglos
antes… y no había internet, jajaja… sorprendente ¿verdad?
(El coach seguía lanzado; era inútil intentar hablar).
--- Muchos triunfadores han seguido las máximas del gran
Artodetekilas. Los mismos Beatles se inspiraron mucho en la idea de profundizar
cuando compusieron “Yellow Submarine”. Y no hay que olvidar una de las frases
que definen el positivismo: “Piensa bien y acertarás”.
--- ??????????????????????????????????????????????
--- Sócrates desarrolló el método socrático para ayudar a
sus discípulos a través de las preguntas. Por eso un coach hace muchas
preguntas. ¿Qué opina?
--- Bueno…
--- ¿Es que no opina?
--- Sí, sí, claro…
--- ¿Claro? Dígame ¿Qué opina?
--- Pues que es interesante lo del griego ese --- contesté
para quitarme el acoso de encima.
--- ¿A qué griego se refiere?
--- A ese que me dijo.
--- ¿A quién?
--- Pues a ese…
----¿Quién es ese? ¿Artodetekilas? ¿O Sócrates?
Me agobié tanto que le dije que tenía prisa y salí
disparado. En el camino a casa, llamé a Pagaitexkutxoundia para pedirle perdón
y solicitar que me readmitiera en la terapia.
(Fragmento de mi libro de ¿humor? ¿ficción? “Quién no tenga un cable cruzado que
tire la primera piedra”, publicado por Dykinson).
Chema Buceta
31-7-2013
twitter: @chemabuceta
www.psicologiadelcoaching.es
Como siempre excelente Dr. Un abrazo desde Oaxaca, México. Ivan.
ResponderEliminarMuchas gracias, Iván. Un abrazo!
ResponderEliminar¿Y no invitaste al coach al psicólogo? Lo digo porque habrías ayudado un poquito al mundo :D
ResponderEliminar¡Excelente reflexión! ¡Muy real!
Muchas gracias por tu amable comentario. Un abrazo!
Eliminarjajajajajajaja excelente descripción de una sesión de coaching de los últimos tiempos, además con esta "coachemanía" que ha surgido ultimamente me hace recordar a un tango argentino casi profético "Cambalache" "Hoy resulta que es lo mismo :ser derecho que traidor, :ignorante, sabio o chorro, :generoso o estafador... :¡Todo es igual! :¡Nada es mejor! :Lo mismo un burro :que un gran profesor. :No hay aplazaos ni escalafón, :los ignorantes nos han igualao. :Si uno vive en la impostura :y otro roba en su ambición, :da lo mismo que sea cura, :colchonero, Rey de Bastos, :caradura o polizón."
ResponderEliminarQue conste que estudié coaching y pienso seguir haciéndolo mas que nada para diferenciarme aunque sea un poco de los "truchos" o de los "chantas " como se dice en Chile. Un saludo cordial Chema.
Muy bueno el tango! Muchas gracias por el comentario. Tomo noto de "truchos" y "chantas", dos palabras que aprendo. En todas partes hay vendedores de humo, jajaja. Un placer, Ingrid.
EliminarMuy que muy bueno!
ResponderEliminarHay que empapelar muchos despachos.
Gracias lo difundo
Muchas gracias! Un saludo!
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